PCE - Agrupación de Collado Villalba: El PCE se opone a nuevo tratado europeo y exige un referendum para su aprobación

martes, 26 de junio de 2007

El PCE se opone a nuevo tratado europeo y exige un referendum para su aprobación

El responsable Internacional del PCE, José L. Centella, anuncia que su partido se movilizará en oposición al intento de sustituir la fracasada Constitución Europea por un nuevo texto que deje en vigencia las partes fundamentales del anterior tratado, limitando incluso limitando el ámbito de aplicación de la Carta de Derechos Sociales, en el mismo sentido desde el PCE se reclama que el nuevo Tratado sea sometido a Referéndum por lo que instara al Grupo Parlamentario Federal de Izquierda Unida, para que exija en el Congreso de los Diputados la celebración de la Consulta Popular, a la vez que impulsara esta petición desde la calle.

Para el PCE, con el nuevo tratado se busca nuevamente de profundizar en un modelo de Europa fundada sobre un solo principio: el mercado capitalista y la disminución de las protecciones sociales. Esta es la razón por la que los servicios públicos están en peligro, la jornada laboral se está incrementando y las formas extremas de precariedad y flexibilización laborales son implantadas en todos los países.

Según el PCE la Europa de hoy está organizada desde los intereses “de los de arriba”, fruto del acuerdo entre gobernantes y supone la merma de cualquier control democrático efectivo en sus organismos principales, tales como el Banco Central Europeo y la Comisión Europea, por ello nos oponemos a este nuevo intento de consolidar la Europa neoliberal, insolidaria, supeditada a la OTAN en lo internacional y con una democracia de baja desnaturalizada, porque esta nueva propuesta continúa y profundiza en la lógica neoliberal de los tratados de Maastricht, Ámsterdam y Niza.

El mercado capitalista se convierte en el pilar “fundamental” de la Unión Europea, en lugar de los derechos sociales, el derecho al trabajo y una nueva idea del pleno empleo con derechos reconocidos. Justo en un momento en que las pensiones, los sistemas de protección social, los servicios públicos, los bienes colectivos y los recursos naturales están amenazados en toda Europa. Nos oponemos a este tratado que propone un proceso de mayor militarización de la UE introduciendo un ejército europeo subordinado y sujeto a la OTAN y el aumento de los gastos militares. Este tratado no contempla el rechazo de la guerra como instrumento en las relaciones internacionales; rechaza la igualdad de derechos de todas las personas que viven en Europa, al margen de su nacionalidad, y por tanto condena a los hermanos y hermanas inmigrantes a la represión policial y administrativa desmedidas.

Esta Europa no es nuestra Europa. Nosotros, las fuerzas de la Izquierda Europea, nos posicionamos a favor de otra Europa., una Europa social, con reconocimiento de una política exterior independiente de los intereses de los EE.UU., y con unos instrumentos de gobierno realmente democráticos.

Esas son las razones por las que deseamos nuevos fundamentos para esa nueva Europa, que abandone el dominio del capitalismo financiero, y belicista; una Europa que se reconcilie con el progreso social, la democracia, una sociedad ecológicamente sostenible, la cooperación entre sus pueblos y, sobre todo, capaz de actuar a favor de la paz y el desarme en un mundo convulsionado por la guerra y el terrorismo.

Queremos una Europa de derechos para todos y todas: derecho al trabajo, al respeto de las diferencias, a la ciudadanía; una Europa que refuerce las garantías sociales, que defienda la naturaleza y el medio ambiente, la promoción de las diferencias culturales y el respeto a las identidades religiosas en el marco de unas instituciones laicas y la introducción de la democracia de género.

Queremos una Europa basada en el derecho a la ciudadanía para todos sus habitantes. Una Europa de la solidaridad internacional en la cual los ciudadanos y las ciudadanas sean los protagonistas de un verdadero proceso constituyente y puedan decidir sobre las políticas a implantar, a la vez que se garantice el control sobre las mismas desee un absoluto respeto a la democracia participativa.
Por estas razones impulsaremos una movilización que formule una alternativa al nuevo intento de imponer un nuevo tratado seudoconstitucional y exigimos en consecuencia que no se apruebe sin consultar a la ciudadanía, porque es un escándalo que ante el fracaso del anterior intento, ahora se trate de aprobar un nuevo texto evitando la posibilidad de que nuevamente sea rechazado por la ciudadanía a la que ahora se excluye definitivamente de cualquier consulta.

En tal sentido, desde el PCE, vamos a iniciar un debate para trazar alternativas concretas al actual proyecto europeo, y en tal sentido hacemos un llamamiento a unir las fuerzas de todos los que estamos por impulsar una amplia movilización desde la base, involucrando a los ciudadanos y ciudadanas en la exigencia de un Referéndum, en el que planteemos que Otra Europa es Posible.